Vida isleña


Lisa Watson es figurita repetida en los medios argentinos. Editora de la única publicación periodística de las Malvinas, Penguin News, se hizo conocida acá a partir de responder los llamados de los periodistas argentinos que desean conocer acerca de la idiosincrasia kelper, su punto de vista del conflicto, como colega e isleña.
Defensora de la idea de la ‘auto-determinación’ de los habitantes de las Malvinas, fiel a Gran Bretaña, expone su defensa a través de su cuenta de twitter y su periódico. A pesar de ser blanco de insultos desmedidos de parte de argentinos intoxicados por un peligroso nacionalismo, la periodista y arreadora de ovejas, se presta para cualquier debate donde reine el respeto.

Isleños y Gran Bretaña.
¿No se sienten menospreciados por los británicos, los cuales, en su mayoría, no los consideran compatriotas?
No, nos consideramos una sociedad con nuestra propia cultura, pero bajo la protección de Gran Bretaña. No tenemos interés en que nos consideren compatriotas, pero tienen responsabilidad para con nosotros, y la cumplen.
¿No creen que el interés por la defensa de la soberanía se corresponde a una futura necesidad de explotación del petróleo malvinense?
Si así fuera, sería beneficioso para nosotros. La posibilidad de extraer petróleo nos daría poder, seríamos más valiosos para Gran Bretaña. No les somos leales por tradición. Somos prácticos. Su protección nos permite vivir como queremos, con el estilo de gobierno que queremos.
The Guardian / The Independent: apoyan negociación. ¿Que opina de los medios británicos que apoyan la idea?
Los periodistas tienen el derecho a opinar como quieran, sobre lo que quieran. No pretendo que todos opinen en sintonía con el partido que esté en el poder. Pero es cierto que puede molestar cuando alguien pretende decidir nuestro futuro, cuando en realidad, eso depende de nosotros.



Ustedes y Sudamérica.
¿Se siente sudamericana?
No, porque nuestra relación más estrecha siempre fue con Gran Bretaña. A mi, personalmente, me encantaría tener una relación más cercana con los países sudamericanos, pero la Argentina siempre se ha interpuesto. Siempre que nos acercamos a su país, éste nos ha tratado de absorber. Siempre hubo un miedo de volvernos muy dependientes de Sudamérica, porque eso le daría más poder sobre nuestra economía a la Argentina. Y la agresividad del gobierno argentino en este último tiempo me da la razón.
¿Qué opinan ustedes, los isleños, acerca de los argentinos? ¿Y acerca del resto de Sudamérica? Tienen posibilidad de optar por una doble ciudadanía, británica- argentina. ¿Lo considerarían?
Lamentablemente, los sentimientos para con el gobierno argentino no son amistosos, debido a su postura política. A nosotros los isleños no nos interesaría tener esa doble ciudadanía, no le vemos ninguna ventaja. ¿Cual sería la motivación, si no deseamos vivir en Argentina? Si hablamos del continente, de Sudamérica, digo que lo amamos y que viajamos constantemente. Santiago de Chile es mi ciudad favorita para ir de shopping.
¿Cuál es su opinión acerca del isleño que optó por ser argentino?
 James (Peck) lo hizo por razones personales. Tiene derecho a hacerlo. Acá a la gente no le gustó verlo con Cristina Kirchner en esa ceremonia, justo el 14 de Junio, nuestro Día de la Liberación. Fue doloroso para nosotros verlo ahí, pero supongo que no tuvo alternativa, y que no fue su decisión que lo filmaran las cámaras de televisión.


¿Cuantos isleños hablan Español?
El Español se enseña en nuestras escuelas, y los más chicos tienen la chance de practicarlo con los chicos chilenos que viven aquí. Solo unos pocos de los grandes saben un poco de Español. El mio es bastante malo, lo cual lamento.
¿Temen una segunda invasión argentina, esta vez con mayor apoyo continental?
Creo que una pequeña parte de cada uno de nosotros lo teme. Uno no atraviesa una experiencia tan traumática como lo hicimos en el ’82, sin el temor de que ocurra otra vez. Pero me sorprendería que la Argentina hiciera algo tan tonto. Creo que perderían el respeto del resto del mundo, así que lo creo bastante improbable.

La vida en las islas.
¿Qué les falta en las islas?
Esto puede parecer extraño, pero no puedo pensar en nada que necesitemos que no sea un lujo innecesario. Viví en Chipre, y en el Reino Unido, donde fui a la Universidad, e igual prefiero el estilo de vida que llevo aquí. Si hay algo que lamento, es que cada vez vive menos gente en el campo. Sin embargo, el gobierno tiene un plan de desarrollo rural, cuyo objetivo es lograr que la gente viva y trabaje fuera de Stanley (Puerto Argentino). Por otro lado, veo algunos dueños de estancias jóvenes, una buena señal para el futuro.


¿Qué costumbres latinoamericanas tiene su sociedad? (si es que tiene alguna)
Usamos nombres en español para los colores del caballo y llamamos al Paso Canadiense (para el ganado) ‘Pasa Libres’. También hay un buen número de nombres de algunos lugares de España. La mayoría de esas palabras se pasó a los trabajadores agrícolas de Escocia por los gauchos argentinos y uruguayos que trabajan principalmente en el área de Lafonia (el Sureste de Malvinas ) donde tenía su estancia un hombre llamado Samuel Lafone. 
Me gusta mucho la parte colorida de nuestra historia, los sudamericanos tienen una historia increíble en términos de equitación, y como una amante de los caballos, los admiro. Nosotros no ocultamos que aquí vivieron argentinos en distintos momentos de nuestra historia, pero la historia no es tan simple como les gusta retratarla.
Para cada argumento que la Argentina ofrece hasta, Gran Bretaña tiene un contra-argumento, la historia es muy compleja. 
Pero al fin y al cabo, mientras que las Malvinas sea sólo una cuestión de orgullo para la Argentina, para nosotros es nuestra propia vida. Las personas, habitantes de las Malvinas, se dedican a su país y con ello me refiero a las Islas. Lo hemos desarrollado con éxito contra todos los pronósticos . Mi familia ha estado aquí 7 generaciones.
 ¿En que se diferencia su estilo de vida con respecto  a la de un británico?
Creo que las vidas de personas en todo el mundo desarrollado son en realidad muy similar en estos días, asi que no resulta fácil la respuesta. Nos levantamos, trabajamos, socializamos, nos quedamos dormidos. La principal diferencia es que somos una comunidad pequeña, todos se conocen entre sí, pero también hay una gran población flotante adicional que viene y que va, los chilenos, los trabajadores de Sta. Helena, trabajadores de plataformas petroleras, científicos, conservacionistas, pescadores, turistas de todas partes el mundo y soldados británicos.
Sin embargo , tenemos nuestras propias tradiciones, como las de “dos noches en vela” en las granjas más grandes, que es  cuando muchas personas salen a la granja durante dos noches de la socialización: comer, beber y juegos - éstas se suelen celebrar para romper el invierno.
También, luego del esquilaje, hay una semana de deportes (carreras de caballos, etc)que también se celebra en una de las fincas más grandes, así que todo el mundo puede asistir. También las carreras de caballos en Navidad en Stanley (Puerto Argentino), que es muy popular.
Mi vida es probable que se diferencie de la de los demás. Si bien, yo soy un editor durante la semana, a menudo ayudo a mis padres  a reunir las ovejas a los fines de semana - normalmente a caballo.


El conflicto de 1982.
¿Cual fue su experiencia personal durante esos meses?
Yo estaba en Puerto Argentino el día de la invasión. Vivía con mi abuela para ir a la escuela, porque mis padres vivían en una granja a cierta distancia de Stanley (Puerto Argentino). Fue terrible y confuso, mi padre fue detenido por unas horas en el momento en que llegó a Stanley (Puerto Argentino)  para ayudar a recoger a los niños de la granja. Yo realmente no sabía en ese momento si alguna vez volvería a verlo. El resto del tiempo lo pasé en la granja, pero tuvimos alrededor de 100 jóvenes soldados argentinos que acamparon cerca. Mi padre también ayudó a los soldados británicos a avanzar a la primera línea cuando estuvieron cerca de Stanley (Puerto Argentino).  Muchos agricultores usaron sus vehículos para ayudar a los soldados británicos en el traslado de tropas y suministros.
¿Ha tenido  usted, o su familia, contacto durante ese tiempo con los soldados argentinos?
Tuvimos mucho contacto con los soldados argentinos. Los oficiales tendían a ser más agresivos y aterradores. Nuestra casa en la granja fue revisada en varias ocasiones, siempre a punta de pistola. Los jóvenes conscriptos argentinos eran diferentes. Parecían muy vulnerables. Eran apenas más viejos que mi hermano mayor. Mis padres siempre se sintieron terriblemente mal por ellos estando en la intemperie con el clima de invierno, y en ocasiones se les dio comida.